G. A. ETCHECHOURY cumple 60 años
El notable teleajedrecista Guillermo Augusto Etchechoury cumplirá 60 años el próximo 16 de octubre.
Nació en la ciudad de La Plata (Buenos Aires). Casado, tres hijas, este ingeniero civil desarrolló su actividad laboral en el campo de la industria.
Su hermana le enseñó a mover las piezas a los 7 años. Entre quienes más lo instruyeron, destaca al GM (ICCF) Carlos Germán Pappier, del que guarda el mejor de los recuerdos. Sus ajedrecistas preferidos son Karpov, Botvinnik y Rubinstein. Toda su actividad «en vivo» la desarrolló en La Plata, donde alcanzó la categoría Superior. También integró el equipo de la Universidad de La Plata en dos Olimpíadas Universitarias Nacionales, pero a los 24 años abandonó la práctica activa para dedicarse de lleno a su profesión.
En 1988 inició la actividad epistolar, la que se ha visto jalonada por alcanzar la cima en los principales torneos locales y continentales.
Se coronó XVI°. Campeón Argentino (2000/2). Previamente, integrando el equipo «La Dama Clavada» (Oscar Palmiero, Daniel Chan, Sergio Verducci y Etchechoury), habían conseguido vencer en el VI. Campeonato Argentino por Equipos (1992/5). Este preciado cetro los defendieron (con el único cambio de Carlos Mairal por Palmiero) con éxito en el VII. CAAPE (1997/9), ahora Etchechoury ocupando el primer tablero, que se lo adjudicó.
El mismo cuarteto asumió la representación de Argentina en VII. Panamericano por Equipos (2000/3), que obtuvo la medalla de oro. Etchechoury se consagró mejor 2° tablero. Simultáneamente, afrontaron el flamante torneo I. Liga por Equipos ICCF (2002/5) donde superaron la etapa preliminar ( Etchechoury ganó el 1° tablero) sin dificultades.
Su última actuación aconteció en la final del XVI. Zonal Latinoamericano (2005/8), cuando compartió el 5/7° puesto.
En reconocimiento a tantos méritos, recibió los títulos de Maestro Nacional (LADAC, 1998), Maestro Latinoamericano (CADAP, 2000), Maestro Internacional (ICCF, 2001) y Maestro Internacional Senior (ICCF, 2013).
En 2008 abandona la práctica activa para dedicarse de lleno a un ambicioso emprendimiento industrial de primer nivel, que lo privó de aspirar a lograr el título de GM, para el que había demostrado que tenía sobradas condiciones.
Juan Carlos Pérez Rodríguez