ILUSKA (1941-2017)
REINARA POR SIEMPRE
El 28 de marzo de 2017 falleció en Río de Janeiro (Brasil) Iluska Pereira da Cunha Simonsen, la mejor jugadora de ajedrez por correspondencia de todos los tiempos del continente americano.
Había nacido el 22 de febrero de 1941. Junto a las primeras letras, su padre le enseña los rudimentos del ajedrez. «Aprenderlo como un juego, estudiarlo como una ciencia», es el precepto de su mentor.
A los 18 años contrae enlace matrimonial con Mario Henrique Simonsen, un reciente egresado Ingeniero Civil especializado en economía, al que le transmitirá sus conocimientos ajedrecísticos y con el cual engendrará tres hijos: Ricardo, María Cristina y Sergio.
Mientras Iluska comienza sus estudios de Antropología, Mario se dedica exitosamente a la actividad financiera y bursátil. Promediando la década del «70 la familia Simonsen experimenta grandes cambios: se muda a Brasilia pues Mario es elegido por el Presidente Ernesto Geisel como su Ministro de Hacienda. Aprovecha Iluska para tomar parte activa en competencias ajedrecísticas en el doble rol de jugadora y organizadora, en este caso en eventos patrocinados por entidades relacionadas con su esposo, quien inclusive llega a fundar un club para su práctica con recursos propios.
En 1978 conquista el Campeonato brasilero femenino que la habilita a representar al país en el Zonal Sudamericano y la Olimpíada FIDE en Buenos Aires.
Había descubierto al ajedrez postal en 1975 al responder a un aviso publicitario aparecido en una revista especializada. Se inscribe en el Torneo de Ascenso de CADAP, A-75 (1° Categoría), donde concluye con 4 puntos (+3, =2, -1) tras Precerutti (ARG. 5.5) y Nunes Dias (BRA,5). En 1978 se afilia al CXEB, compitiendo en sus dos principales pruebas: Campeonato Brasileño y Copa Brasil, transformándose en una asidua animadora en varias finales donde suma algo más del 60% de los puntos en juego enfrentando a los mejores ajedrecistas del Clube.
En 1979 hace una nueva incursión en la arena internacional al participar en las preliminares del Torneo 34° Aniversario de LADAC, las que supera exitosamente. La Final (1982/4) es el trampolín que la lleva a los primeros planos, tras compartir con el campeón argentino Carlos Rinaldi el primer lugar con 14.5 puntos, producto de 13 triunfos, 3 empates y una derrota.
Ya encaramada en el segundo lugar del ranking nacional, es convocada a integrar el equipo brasilero en el IV. Panamericano de CADAP (1984/8), reservándosele el tercer tablero, donde con seis victorias y tres tablas (7.5) escolta al canadiense Stoll (8.5) y logra media norma de Maestro Internacional (masculino).
Paralelamente se aboca a otro objetivo: la corona ecuménica femenina. En la Semifinal del V. Campeonato Mundial (1985/92) concluye detrás de la checa Mozna (10.5) con 9.5 (+8, =3, -1), obteniendo el pasaporte a la Final.
En simultáneo afronta el V. Panamericano (1988/93) donde conforma el e le permite a Brasil alcanzar la medalla de bronce, defendiendo (y ganando) el segundo tablero (+6, =3, -0), consiguiendo la segunda norma de IM, título que le es conferido en el Congreso de Gdansk (Polonia, 1993), el primero de varones que obtiene una mujer en América. En 1987 ya había recibido el de Maestra Latinoamericana (CADAP), otra vez algo inédito en su género.
Apenas terminada esta competencia, envía los primeros movimientos en el torneo Magistral LADAC-50 (1992/7), el que culminará con el dúo Paré (CAN) y Toro Solís (CHI) en el primer escalón (12.5 puntos), seguidos por Pappier (ARG) 11.5, Iluska (+8, =5, -3) y Blanco Gramajo (GUA) con 10.5. Tan destacada performance le reporta impretar el título de Gran Maestra femenina (necesitaba 6.5 puntos) y revalida el de IM (10).
En 1993 se convierte en la ajedrecista N° 2 en el ranking mundial de damas (ICCF).
La israelí Kristol, con 11 unidades, recupera en el V. Campeonato Mundial femenino (1993/9) la corona que ganara en el tercero. Iluska se ubica quinta (+6, =3, -3) con 7.5. No podemos obviar una desgraciada circunstancia que nuestra homenajeada tuvo que sufrir en 1996 cuando su esposo enferma gravemente y tras una prolongada internación fallece a comienzos del año siguiente. Dedicada a su atención, desatiende sus partidas. No obstante ello, alcanzó la puntuación requerida para acceder al título de IM femenina, concedido en el Congreso de Bad Neuenahr (Alemania, 1996).
Cuatro años después, en el cónclave de ICCF en Daytona Beach (Estados Unidos), recibe el diploma de Gran Maestra Femenina. Y, otra vez, fue la pionera en este rubro en esta parte del mundo.
Aprovecha las siguientes dos competencia a la que es invitada para revalidarlo: Memorial Gillman «D» (1999/2001), donde superó en un punto la norma y el conmemorativo CXEB-30 «A» (1999/2005) convalidándola con media unidad sobre lo exigido.
A esta altura entiende que la generalización del uso de computadoras desnaturaliza la competencia. Es el nivel de un programa el que valida a un rival. Siente que dirime conocimientos contra una máquina. Ya ha perdido la fascinación. Se retira de las lides en pleno apogeo.
Los últimos años la encuentra escribiendo artículos y dando conferencias sobre Antropología, además de desarrollar su vena artística en la pintura sobre porcelana, participando en numerosos concursos y exposiciones nacionales.
Iluska es un término eslavo que significa «mujer honrada por su vivacidad y perseverancia». No pude encontrar una alegoría más perfecta.
Juan Carlos Pérez Rodríguez